El riego por goteo es uno de los mejores para el olivar y los almendros.
Razones que lo justifican:
- Se ahorra agua, porque pasa directamente al árbol y se evita evaporación.
- Es mucho más regular y si hay pendientes no se pierde agua.
- Se erosiona menos el suelo.
- Se pueden aplicar fertilizantes directamente al árbol.
- El riego es más constante.
- Controlando la humedad con sensores/sonda de humedad, conductividad y temperatura se evita la salinidad.
- Se puede programar de noche y se evita la evaporación.
- No se moja todo el terreno y evita el crecimiento de maleza.
- Puede ser superficial o enterrado.
La dificultad principal es que si se interrumpe el riego, por problema de sequía o por roturas, el árbol puede sufrir la sequedad con más rigor, porque sus alrededores no tienen humedad y no le ofrecen reservas.
Para esto Plantae ofrece la posibilidad de controlarlo con un caudalímetro adaptado a todas las tuberías.

Riego por goteo en olivos
Los olivos son tradicionalmente de secano, pero se ha comprobado que el riego en algunas épocas les favorece y según para qué variedad se han logrado magníficas producciones y desarrollo del cultivo. No obstante a la hora de aplicar el riego en olivo hay que vigilar ciertas variables para un correcto desarrollo vegetativo:

- El tipo de suelo.
- La climatología de la zona.
- La densidad de la plantación.
- El tipo de olivo: nada que ver el ciclo de riegos para un olivo cornicabra en la zona de Los Navalmorales como un olivo arbequina en súper intensivo de Córdoba.

Riego en los almendros
El almendro necesita bastante agua en primavera, verano y principios de otoño. También es muy importante el riego después de la cosecha. Esto influye en el número de flores del año siguiente y por consiguiente en el fruto.
Se aconseja el riego por goteo por:
- Establecer una frecuencia que depende de la climatología.
- Valorar la cantidad, que depende del tipo de suelo.
- Cuidar que no haya encharcamientos, le son muy desfavorables. Es importante valorar la cantidad de agua que se suministra.
Si además es controlado por sensores de humedad y temperatura que hacen que la planta tenga en cada momento el agua que necesita, la calidad y la producción aumenta de forma considerable.

Algunas referencias de esta información proceden de: