Hoy están de moda en los entornos de las grandes ciudades y dentro de ellas, los huertos urbanos. Plantae inicia el riego controlado por sensores en un huerto situado en Horts del Pla en la provincia de Girona.
¿Qué son los huertos urbanos?
Son espacios destinados fundamentalmente al cultivo de verduras, frutas, plantas aromáticas, legumbres y hasta plantas medicinales y que se instalan en recintos interiores o exteriores normalmente para uso particular.
El objetivo fundamental es conseguir productos saludables y que se puedan consumir de una forma directa.

¿Cómo se hace un huerto urbano?
Lo principal es tener un terreno cultivable. También se puede hacer en terrazas con macetas apilables, verticales u horizontales.
Para cultivar un huerto urbano debemos tener en cuenta varios factores:
- El riesgo de heladas, especialmente si son tardías.
- El número de horas del sol.
- El tipo de tierra que ponemos o tenemos.
- Las posibilidades de riego, muy conveniente por goteo.
- Tipo de cultivos idóneos para el lugar elegido y adaptados a la climatología.
Una vez elegido el terreno debemos seguir los pasos:
- Preparar la tierra con un arado para remover la parte cultivable. Eliminar piedras y enterrar ramas que pueden servir de abono.
- Preparar los semilleros y en la época idónea para dada cultivo según lugar y horas de sol, trasplantar en bancales.
- Hacer surcos en los bancales, adaptados a cada cultivo. Regar al trasplantar.
- Entutorar las plantas que lo necesiten al plantar o al ir creciendo como pasa con pimientos, tomates, pepinillos, judías verdes y otras.
- Cavar las malas hierbas y airear la tierra de vez en cuando. Regar por surco, aspersión o goteo según se vea conveniente.
- Algunas plantas deben de tener una distancia al menos de un metro entre una y la siguiente por su ramaje, como los calabacines, las calabazas, los pepinos y las alcachofas.

Los huertos familiares son la antesala del los huertos urbanos. Utilizados desde la antigüedad para alimentar al núcleo familiar, hoy se trasladan a la ciudad y sus alrededores para consumir productos frescos y saludables en forma de huertos urbanos.

Cuidados de un huerto urbano
En la mayoría de los huertos la plantación se hace por surcos. El riego se hace normalmente por aspersión o goteo.
Para que el riego sea el correcto debemos tener en cuenta varios factores:
- Que el suelo esté nivelado.
- Importante que tengamos parcelas separadas.
- Que el terreno se franco limoso o franco.
- Controlar la acumulación de sales. Para ello es conveniente cambiar el cultivo de lugar entre una temporada y la siguiente. Cada planta requiere unos nutrientes y el cambio de lugar hace que las sales se acumulen menos.






Los sensores Plantae en los huertos urbanos
Nuestros técnicos estudian el cultivo, el tipo de terreno y el clima de la zona. Valoramos el número de sensores y la situación idónea.
Los sensores nos miden:
- La humedad del subsuelo adaptando la profundidad al cultivo según el enraizado.
- Temperatura de subsuelo.
- Conductividad y por tanto valores de salinidad.
- Medida del caudal de agua a regar con un caudalímetro y tiempo de riego.
- Podemos tener información en tiempo real en nuestro teléfono móvil o táblet.












Ventajas de los huertos urbanos
Siempre debemos considerar que tiene que ser su cultivo agradable, que nos motive y que podamos dedicarle tiempo.
Tener un huerto urbano necesita unos cuidados y una dedicación pero tiene su recompensa
- Podemos disponer de productos frescos.
- Con los cuidados adecuados el huerto es ecológico.
- Podemos guardar conservas de los productos, como tomate, pimientos, pepinillos, guisantes y disponer de ellos todo el año.
- Disfrutar del aire libre cuando le dedicamos cuidados.
- Compartir nuestras verduras con la familia y amigos.
- Disfrutar de la naturaleza.

Fuentes consultadas: